No todo lo importante es estratégico, mas todo lo estratégico sí lo es.

Es notable la tendencia en el mundo de los negocios de catalogar a todo de “Estratégico” cuando en realidad quizás sea un tema que no pasa de la categoría de “Importante”.

Decidir qué cuestiones se darán a conocer al público interno y externo referidas al desarrollo de un negocio es algo definitivamente estratégico. La selección de la próxima sede de nuestra convención anual es importante pero no estratégico.

Las palabras «importante» y «estratégico» se refieren a conceptos diferentes, aunque a menudo se relacionan.

Lo importante hace referencia a algo que tiene gran peso, valor o relevancia en un contexto específico.

Es subjetivo y depende de las prioridades actuales o inmediatas.

Estos temas importantes son esenciales para el funcionamiento operativo, pero no están relacionados con decisiones que transformen, redirijan o posicionen a la empresa en el mercado.

Son cuestiones más tácticas u operativas que estratégicas.

Ejemplo: resolver un problema técnico inmediato es vital para operar, pero no tiene impacto estratégico.

Lo estratégico, en cambio, Implica un enfoque a largo plazo, orientado hacia objetivos clave o a la visión general. Está relacionado con la planificación y la toma de decisiones que afectan el resultado global.

Ejemplo: es estratégico invertir en innovación para mantener nuestra posición en el mercado.

Estas decisiones afectan aspectos fundamentales que definen el rumbo y posicionamiento de la empresa en su entorno competitivo.

A continuación, se detallan las razones clave:

1. Impacto en los objetivos a largo plazo

Las decisiones estratégicas se toman con base en los objetivos generales de la organización. Estas determinan cómo se alcanzarán metas como el crecimiento, la expansión, la diferenciación o la supervivencia en el mercado.

Ejemplo: decidir entrar en un nuevo mercado internacional afecta profundamente el futuro de la empresa.

2. Implicaciones amplias y globales

Lo estratégico abarca múltiples áreas o funciones de la organización. Tiene un impacto transversal en aspectos como la cultura organizacional, los recursos financieros, el talento humano y la tecnología.

Ejemplo: Implementar una nueva tecnología de automatización redefine procesos y recursos en toda la empresa.

3. Requiere recursos significativos

Las decisiones estratégicas suelen implicar inversiones de tiempo, dinero y esfuerzo considerables. Estos recursos son limitados, por lo que asignarlos de manera equivocada puede generar riesgos importantes.

Ejemplo: hacer reingeniería de procesos y cambiar el modelo de negocio implica altos costos financieros y organizacionales.

4. Define la competitividad y la sostenibilidad

Las decisiones estratégicas influyen directamente en la posición de la empresa frente a sus competidores y en su capacidad de adaptarse a un entorno cambiante.

Ejemplo: desarrollar una ventaja competitiva, tanto vinculada a los costos de los productos o servicios como a las estrategias de enfoque en nichos de mercado o diferenciación de la competencia, es clave para mantenerse relevante en el mercado.

5. Son difíciles de revertir

Las decisiones estratégicas suelen tener consecuencias de largo plazo y, una vez implementadas, no siempre son fáciles de cambiar sin costos significativos.

Ejemplo: una fusión con otra empresa puede transformar la estructura operativa y la cultura organizacional de forma irreversible.

Conclusión:

Lo estratégico es importante porque define el «qué» y el «por qué» de la organización, marcando la diferencia entre el éxito sostenible y el estancamiento o fracaso.

Sin atender lo estratégico, la empresa podría operar eficientemente a corto plazo, pero perder su relevancia en el futuro.

Por Antonio Ezequiel Di Génova.

• Magíster en Neuro Comunicación (ESCO Universitas – Universidad Católica de Murcia – España)
• Magíster en Comunicación Corporativa, Protocolo y Asesoría de Imagen (IMEP -España)
• Licenciado en Relaciones Públicas (Universidad J. F. Kennedy – Argentina)
• Posgrado en Identidad e Imagen Institucional (Universidad de Belgrano – Argentina)
• Presidente de REDIRP (Red Iberoamericana de Profesionales en Relaciones Públicas).
• Director del Instituto Latinoamericano de Comunicación Estratégica.
• Editor del Portal de Relaciones Públicas “RedRRPP”
• CEO de Antonio Di Génova Group. Consultoría Integral de Relaciones Públicas. Prensa, Organización de Eventos, Comunicación y Marketing Digital.
• Profesor de Grado en la Universidad de Belgrano – Argentina.
• Profesor de la Escuela de Capacitación y Negocios de la UNLaM – Universidad Nacional de la Matanza – Argentina.
• Profesor de Posgrado en la UNLP – Universidad Nacional de la Plata –  Argentina.
• Organizador de la Cumbre Latinoamericana de Relaciones Públicas y Comunicación Estratégica y del Simposio Internacional de Relaciones Públicas Internas y Externas.
• Disertante en numerosos Congresos & Convenciones Nacionales e Internacionales.
• Autor de los siguientes libros:
• Manual de Relaciones Públicas e Institucionales (1°, 2° y 3° edición); Global PR; Ceremonial Empresarial (1° y 2° edicion); Organización Integral de Eventos; Organización de Congresos y Convenciones; Estrategias de Relaciones Públicas para la prevención y manejo de Crisis; GESCOM: Gestión Integrada de Relaciones Públicas, Eventos y Protocolo; Oratoria Neuroexperiencial y Comunicación.